La oferta de colchones hoy en día es muy amplia lo que nos lleva a una gran confusión sobre qué tipo de colchón comprar: de muelles, viscoelásticos, de látex… Además de los diferentes materiales también nos encontramos con precios muy diferentes desde colchones más sencillos por poco más de 200€ hasta los más sofisticados y de alta tecnología por 1.000€.
Empezamos la clasificación de los colchones por aquellos más comunes como son los colchones de muelles. Estos pueden ser continuos, independientes o embolsados. Los colchones independientes se caracteriza por estar formados por núcleos de muelles metálicos, se enlazan unos a otros con hilos metálicos y están colocados en vertical.
Los colchones de muelles continuos cuyo entramado entre los muelles es de un hilo único. Tanto este colchón como el anterior están cubiertos por algodón o espuma lo que los convierte en unos colchones muy frescos.
Los colchones de muelles embolsados son el tercer tipo de colchones de muelles, estos se caracterizan por muelles independientes metidos en sacos de tela y unidos entre sí. Estos colchones llevan un recubrimiento de espuma o de látex lo que permite que se adapten bien al cuerpo. Nunca hay que fiarse de aquellas empresas que garantizan una vida útil del colchón de más de 10 años porque no es así.
Los colchones de espuma son muy fáciles de manejar y ya casi no se encuentran salvo para las minicunas de los bebés. Los colchones viscoelásticos es otro de los tipos de colchones son más caros pero ofrecen una mayor distribución del peso corporal.
Los colchones de látex son perfectos para las personas alérgicas ya que evitan las colonias de ácaros. Además son bases con una gran firmeza por lo que distribuye bien la presión por el cuerpo de manera uniforme.
¿Ya sabes cuál quieres?, no dudes en pedir más información y consejo a los profesionales que te atiendan ya que te configurarán el mejor colchón según las características particulares de cada uno.